Historia del valle

El escudo

A la vista de los antecedentes que obran en el Archivo Real y General de Navarra, se puede afirmar que cuando menos desde mediados del siglo XIX, y posiblemente ya antes de esa época, el Valle de Elorz utilizaba en sus sellos un sencillo emblema consistente en un encino, que por aparecer siempre en tinta azul en los documentos, no se puede afirmar cuáles eran sus colores heráldicos, si es que los tuvo. Don Ignacio Baleztena, que investigó mucho la Heráldica Municipal de Navarra, aventuró la hipótesis de que dichos colores pudieran ser el verde o sínople para el árbol y el oro para el fondo. En época posterior, mediados del siglo XX, este emblema fue sustituido por una torre de tres almenas en su color, sobre fondo o campo de oro, que anteriormente venía usando en sus sellos el concejo del lugar de Elorz.

En fecha indeterminada, pero seguramente dentro del siglo XIX, la Alcaldía del Concejo de Noáin empezó a utilizar un sello con la imagen de un tramo de su famoso acueducto, al principio con cinco arcos, que luego se redujeron a cuatro y modernamente a tres. Con anterioridad a esa fecha lo más probable es que emplease el emblema común a todo el Valle.

Con motivo de la extinción del Concejo de Noáin el día 3 de abril de 1995 y la creación del nuevo Ayuntamiento de Noáin (Valle de Elorz), en sesión celebrada el día 15 de septiembre de 1995, se acordó aprobar como escudo de esta entidad un yelmo en la parte superior y debajo del mismo, la figura del acueducto de Noáin y en su parte inferior la torre del municipio de Elorz.

Historia del valle

PREHISTORIA

En el Paleolítico, el hombre prehistórico vivía ya en el Valle de Elorz. Habitaba en la cueva “Diablo-Zulo”, que está en la Sierra de Alaiz y donde se han encontrado parte de los instrumentos y armas que utilizaban, fabricados en piedra.

En el Neolítico aparecen las primeras aldeas en el Valle de Elorz, donde se han encontrado trozos de cerámica y de hachas. En Imarcoain se encontró un puñal de piedra pulimentada, que se guarda en el Museo de Navarra.

LOS ROMANOS Y LA CRISTIANIZACIÓN

Los Romanos trajeron con ellos el desarrollo. Las calzadas unían todo el Imperio con Roma. El Valle de Elorz, por su situación, era un centro estratégico que unía los pasos del Pirineo con la Cuenca del Ebro.

Según ciertos autores algunos topónimos del Valle tendrían su origen en la época romana como: Imárcoain (lugar de Marco), Noáin (de Nunius), Andricain (de Anderecus). También se han encontrado restos de cerámica romana y alguna moneda, en Imarcoain.

EDAD MEDIA

A mediados del siglo XI aparecen varios documentos relativos al “Valle de Elorcibar” dentro de una posible administración de la monarquía en cada valle.

En el siglo XI, el paso de peregrinos que iban a Santiago de Compostela motivó que muchos comerciantes se instalaran en los pueblos que estaban en el Camino de Santiago. Así se crea un comercio activo en todo lo largo de este Camino, que pasaba también por el Valle.

En el año 1521 el depuesto rey de Navarra, que se había instalado en la Navarra francesa o Baja Navarra, intentó reconquistar el reino. Envío un ejército mandado por el Señor de Asparros. Lograron llegar a Pamplona, y acamparon junto a Tiebas, mientras que los castellanos lo hicieron cerca de Noáin. La batalla se dio el 30 de junio en las campas de Noáin, venciendo los castellanos. Se cerraba así, en pleno Valle de Elorz, el periodo de independencia del Reino de Navarra.

EDAD MODERNA

Durante la edad Moderna la población aumentó bastante aunque, en algunos periodos, bajaba debido a las crisis económicas o a las guerras. Sabemos que, en el año 1787, había 944 habitantes en el Valle de Elorz, y que en 1857 eran 1174.

Las gentes de Elorz seguían viviendo del campo, cultivando sobre todo trigo y cebada, además de algunos frutos traídos de América por los conquistadores españoles, como era el caso del maíz y de la patata. La vid la cultivaban, como ya hemos dicho antes, para obtener un vino ligero y algo agrio llamado txakolí.

También se dedicaban a la ganadería, ya que en Alaiz había pastos donde apacentar el ganado. Habría también algo de artesanado, zapateros y herreros sobre todo. Los días de mercado, la gente de Elorz iría a Pamplona y a Monreal a vender sus productos y así poder comprar telas, aperos para el campo y otras manufacturas que les hacía falta y que ellos no podían fabricar.

LA APARICIÓN DEL CARLISMO

Los carlistas decían defender las tradiciones de nuestra tierra, así como los Fueros de Navarra y la religión Católica. Según ellos, estos valores estaban en peligro a causa del gobierno liberal.

A lo largo del siglo XIX, se sucedieron tres guerras Carlistas, aunque la tensión estuvo presente durante todo el siglo y también después.

El Valle de Elorz, como la mayoría de los pueblos de Navarra, era decididamente carlista.

Hubo muchos enfrentamientos y escaramuzas en la zona del Carrascal, y en 1835, durante la Primera Guerra Carlista, los carlistas llegaron a atacar el destacamento liberal que estaba en Noáin.

Como consecuencia de la derrota de estas guerras, Navarra perdió su condición de Reino en la Corona Española, para pasar a ser una provincia más.

LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA

En el año 1807, los ejércitos franceses de Napoleón cruzaron el Pirineo y conquistaron el país ocupándolo en poco tiempo.

Los franceses instalaron una guarnición en Noáin, y sabemos que cometieron muchos actos salvajes contra su población. Quemaron la iglesia vieja con sus cuadros y retablos, de manera que sólo quedaron las paredes. (Según dejó escrito el cura de aquella época).

Al poco tiempo, se formaron guerrillas que luchaban contra los franceses; en Navarra el cabecilla de estos guerrilleros era Javier Mina, que según parece nació en Otano.

La guerra contra los franceses fue muy dura y en el transcurso de ella los franceses saquearon Guerendiáin y Noáin. Finalmente, en 1813 fueron vencidos y expulsados. El rey Fernando VII volvió de su exilio.

EL SIGLO XX

Aunque el ferrocarril ya había entrado en el Valle a mediados del siglo pasado, es a comienzos del siglo XX cuando empiezan a darse los avances más profundos.

En este siglo se mejoraron las comunicaciones, aparecieron máquinas para el trabajo agrícola, los abonos inorgánicos y las Cajas Rurales, que daban una mayor seguridad al oficio de agricultor.

Como consecuencia de la buena situación económica, la población aumentó considerablemente. Esto hizo aumentar la superficie cultivada, para poder alimentar a toda esa población, y se cultivaron antiguos comunales y tierras de pastos. Por lo tanto, la actividad ganadera disminuyó bastante.

La vid también disminuyó, ya que con las mejores comunicaciones podían llegar vinos de la Ribera, de superior calidad.

En los años 70 se hizo la Concentración Parcelaria en el Valle. Estaba pensada para que las tierras de cada propietario fueran más rentables y fáciles de poner en cultivo.

Además, Elorz es el centro más importante de comunicaciones de Navarra. Ya hemos dicho que el ferrocarril atraviesa sus tierras desde hace más de siglo y medio. Hay dos carreteras nacionales y la autopista A-15. Por último, en 1972 se instaló el Aeropuerto de Noáin.

LA INDUSTRIA

La llegada de las primeras industrias al Valle produjo cambios importantes. Llegaron también los primeros emigrantes y gentes del resto de Navarras. Lo que provocó que cambiaran muchas costumbres y usos. Además, la población se fue concentrando en Noáin, mientras que pueblos como Yarnoz, Otano, Ezperun o Guerendiain sufrieron una fuerte despoblación, si bien en los últimos años ha crecido el número de vecinos.

La industria del Valle es muy variada, y hay fábricas dedicadas a electrodomésticos, muebles, productos metálicos, maquinaria agrícola, artes gráficas y otras de nueva implantación.

Personajes ilustres

Javier Mina

Javier Mina era llamado “el Mozo” o “el Estudiante”. Unificó todas las partidas guerrilleras encargadas de la defensa de Navarra durante la Guerra de la Independencia, en el “Corso Terrestre de Navarra”.

Era hijo de labradores y su lugar de nacimiento no está claro, dudándose entre Otano e Idocin. Estudió en el Seminario de Pamplona y luego en la Universidad de Zaragoza, donde participó en la defensa de la ciudad bajo las órdenes de Palafox, para luego volver a Navarra.

La zona preferente de actuación del Corso Terrestre parecía ser la banda media de Navarra, pero sobre todo los alrededores de Pamplona y alcanzó éxito notable en Estella, Puente la Reina, Aibar, Caparroso, Valdizarbe, y, fundamentalmente, en las tierras adyacentes al Carrascal.

Precisamente tras un encuentro con las tropas francesas en los Altos de Subiza, Mina y su partida llegaron a Guerendiain donde permanecieron varios días por falta de municiones. El 27 de marzo de 1810 pasó a Labiano y en ese lugar cae prisionero de los franceses. Trasladado a una cárcel francesa, volvió a España en 1814, pero en 1816 embarcó hacia México donde murió el año siguiente luchando contra las tropas realistas en Pénjamo.

Más información en Wikipedia.org.

Ventura Rodríguez y Tizón (1717-1785)

Hijo de una familia modesta de albañiles, se inicia en las obras del Palacio de Aranjuez (donde trabaja su padre), bajo la dirección de los arquitectos italianos y franceses, traídos por el rey Felipe V para la construcción del Palacio. Culmina su formación en el Palacio Real de Madrid, como ayudante de los célebres arquitectos Marchand, Galuzzi Jubara y Sachetti.

Con el tiempo, gracias a su prestigio, consigue ser nombrado Director de Arquitectura de la Real Academia de San Fernando, Maestro Mayor de Obras y Fuentes de Madrid, Arquitecto de la Santa Iglesia de Toledo y miembro de otras academias y sociedades artísticas.

Su estilo inicial está entroncado al barroco romano, bajo la influencia de Juvara y Sanchetti, con obras como la capilla del Palacio Real, la Iglesia de San Marcos de Madrid o la capilla del Pilar de Zaragoza. Con el tiempo evoluciona hacia el clasicismo inspirado en Herrera, con la fachada de la Catedral de Pamplona. Por el estudio de M. larumbe de él son las obras de la fachada de la «Azabachería» de la Catedral de Santiago de Compostela, el decorado de la iglesia de la Encarnación de Madrid, el Trasparente de San Julián de Cuenca, la iglesia del convento de Silos (Burgos); y otros grandes proyectos que no llegaron a realizars, como la suntuosa iglesia de San Bernardo y San Francisco el Grande de Madrid o el Santuario de Nuestra Señora de Covadonga. Un sin número de obras y proyectos hablán de la genialidad y capacidad de trabajo de Don Ventura Rodríguez y Tizón.

En Navarra hizo tres obras: Proyecto de traída de aguas de Subiza a Pamplona (1782), de la cual el Acueducto de Noáin es un tramo, la fachada de la Catedral de Pamplona y la Casa de la Misericordia de Tudela.

Más información en Wikipedia.org.

Miguel de la Quadra-Salcedo

Impulsor, organizador y director de la Ruta Quetzal BBVA, nació en Madrid en 1932, aunque su infancia transcurrió en Pamplona. (Casa familiar en Otano – Valle de Elorz).

Hombre polifacético, ingeniero agrónomo, periodista y aventurero, también ha destacado en el mundo del deporte.
Dotado de una gran capacidad para la improvisación, es capaz de alterar los planes previstos en cualquier momento, movilizar a las casi 400 personas que forman la caravana de la Ruta y sorprender a todos con alguna iniciativa genial.
Como reportero fue el primer corresponsal de Televisión Española en Iberoamérica y dirigió varias series geográficas e históricas para la pequeña pantalla. Sus trabajos como periodista le han valido numerosos premios, como el Internacional de la crítica de Televisión en Cannes por La muerte del Che Guevara o el Internacional de Televisión por La larga marcha de los eritreos.

Como deportista ha sido dos veces olímpico, en Roma y Melbourne, en lanzamiento de disco y ha estado en posesión del récord del mundo de lanzamiento de jabalina al modo español (112 metros), luego invalidado por su heterodoxo estilo. Infatigable viajero, explorador insaciable… Miguel de la Quadra-Salcedo es, hoy por hoy, el reportero español más admirado por las viejas y nuevas generaciones.

En 1985 puso en marcha Aventura 92, que hoy lleva el nombre de Ruta Quetzal BBVA, con jóvenes de 43 países, viaje que estudia la geografía e historia de Iberoamérica y España. Este programa, que ha becado a más de 7.500 chicos y chicas, ha sido declarado de interés por la Unesco.

Fue en 1956 cuando este periodista de origen vasco-navarro «descubrió» América, gracias a una beca. Allí comenzó su «obsesión por acercar las dos orillas del Atlántico», al comprobar que los jóvenes americanos sabían mucho más sobre España que los españoles sobre América.
También empezó entonces su pasión por el Amazonas, río que exploró durante tres años realizando clasificaciones etnobotánicas para el Museo de Antropología de Bogotá.

Entretanto llegaron los éxitos olímpicos en lanzamiento de disco en Roma y Melbourne, que le lanzaron a la fama, y poco después fue nombrado primer corresponsal de TVE en Hispanoamérica.

Gracias a sus trabajos sobre Neruda, Borges, Carranza, León Felipe… incluso, la muerte del Ché Guevara, cientos de miles de españoles «descubrieron» el Nuevo Mundo desde sus hogares. Pero su verdadero sueño era organizar una expedición, con jóvenes españoles e iberoamericanos, que emulara las epopeyas históricas y geográficas. Unas palabras pronunciadas por Su Majestad el Rey Don Juan Carlos, en las que sugería la necesidad de fomentar el conocimiento de los jóvenes de ambas orillas del Atlántico, dieron forma al sueño y así nacieron estas expediciones culturales, iniciáticas y de aventura que desde 1993 se llaman Ruta Quetzal.

Ya sólo faltaba encontrar un patrocinador. Así que, como hizo Cristóbal Colón hace cinco siglos, Miguel de la Quadra-Salcedo empezó la búsqueda de un mecenas que hiciera posible su sueño. El grupo financiero BBVA son los vientos alisios de la Ruta Quetzal.

Miguel de la Quadra-Salcedo falleció el viernes 20 de mayo de 2016 en su domicilio de Madrid, a los 84 años de edad.6 Su muerte fue seguida de varias manifestaciones de estima en los medios por parte de antiguos colaboradores y compañeros de profesión.